Es una raza de origen europeo, descendiente del bichón maltés o Water Spaniel. Hace muchos siglos, los perros llamados Barbets o Perros de agua fueron cruzados con pequeños perros blancos de regazo, creando cuatro tipos de «barbichons», un nombre que luego sería reducido a Bichón.
Entre estos está el Bichón boloñés, el Bichón habanero, el Bichón maltés y el Bichón de Tenerife, siendo este último reconocido con el tiempo como Bichón frisé, el cual fue desarrollado en las Canarias en Tenerife.
Más tarde se popularizó en Francia (siendo una de las razas de perro que poseía María Antonieta) y después de la Revolución francesa, pero su belleza y disposición es tal, que eventualmente fue recogido por el público en general. En la década de 1930, varios criadores franceses establecieron la raza, que fue registrada en el club de perros de Francia en 1934.
Es una raza cariñosa y amigable. El mantenimiento del pelo puede llegar a demandar la asistencia de un peluquero canino profesional. También hay que limpiar periódicamente las legañas y recortar el cabello en la zona de los ojos.
Salud
Debido a cruces no adecuados, el bichón frisé tiene padecimientos de salud propios de su raza, entre los que se cuentan:
- Luxación patelar medial: Es una debilidad de las rótulas o babillas que puede ser controlado mediante la cría selectiva.
- Cataratas juveniles: Se puede presentar la pérdida de la vista, incluso en ejemplares muy jóvenes. Las recomendaciones en cuanto a este tipo de problema es evitar la reproducción del ejemplar afectado.
- Cálculos en la vejiga: Es una predisposición natural de los perros de razas pequeñas, que puede verse empeorada por excesos de proteína, magnesio o fósforo en la dieta del animal. Los síntomas puede incluir orina frecuente, desánimo, malestar general y debilidad. En ocasiones es necesario recurrir a la cirugía, pero puede evitarse con frecuentes paseos, una dieta controlada en proteínas y suficiente ejercicio.
- Otros padecimientos: El bichón frisé también puede padecer en menor medida de displasia de cadera, epilepsia, pigmentación pobre de la piel, alergias, cierre avanzado y cambios genéticos en el temperamento.
- Infección de boca: Debido al tamaño de los dientes y que a veces los incisivos inferiores se apiñan con suavidad, la limpieza de estos debe realizarse diariamente con golosinas destinadas a ello y cepillos de dientes, así mismo se recomienda una limpieza de boca anual en el caso de que sea necesario.