Es una raza relativamente nueva, cuyo origen se remonta a 1899, cuando en Alemania se inició un programa de crianza para guarda y protección de los rebaños de carneros en contra de los lobos. Maximilian von Stephanitz, es considerado el padre de la raza.
Tras la aparición de la Asociación de Amigos del Pastor Alemán en 1899, se inició una selección de ejemplares cuyos cruces mejoraron tanto el aspecto psíquico como físico del animal.
Pastor de vacas y ovejas con infatigable trote y gran inteligencia. Ha sobresalido en numerosos trabajos útiles al hombre, tales como: guardián, perro guía, policía, perro de ataque, detector de drogas, etc. Es un animal vigoroso, ágil, bien musculado y despierto. Sus proporciones físicas deben guardar relación no solo en su apariencia sino también habrá que fijarse en su temperamento. Suele ser un perro bien equilibrado, con un desarrollo armonioso de los miembros anteriores y posteriores. Un buen ejemplar agrada a primera vista; también es muy fuerte. A veces puede ser agresivo y un poco dominante dependiendo de la forma en la que se educa. Por todo ello es un perro dedicado al trabajo.
El entrenamiento y socialización deben comenzar desde el primer momento en que el cachorro llega a la familia.
Salud
Los pastores alemanes tienen una esperanza de vida de entre diez y doce años. El pastor alemán es de las razas con más problemas genéticos debido a su cría irresponsable. Como es común en perros grandes, esta raza suele padecer displasia de cadera. La cruza responsable es necesaria para evitar que este tipo de defectos se propaguen de generación en generación para tener ejemplares sanos que no sufran dolor y sean útiles para el trabajo, por lo que se recomienda adquirir al cachorro en un criadero certificado y exigir ver el pedigrí del cachorro y preguntar si su familia ha contraído ese problema.
Otro problema de salud, que a veces se presenta en esta raza, es la Enfermedad de Von Willebrand. También tienen tendencia a la deficiencia pancreática, lo que significa que el páncreas deja de producir enzimas y el animal es incapaz de procesar o absorber nada. Existe medicación para tratarlo, aunque desafortunadamente no resuelve ni cura el problema al 100%, y además el tratamiento es bastante costoso.
Otras enfermedades que se pueden presentar son:
- Panosteitis: formación, crecimiento e inflamación excesivo del hueso alrededor de las articulaciones provocando en la conocida como “cojera del cachorro”.
- Síndrome de cauda equina: signos neurálgicos resultantes de la compresión de los nervios de la espina en la región lumbosacra.
- Pannus corneal canino (queratitis crónica superficial): inflamación de la córnea que puede producir ceguera potencial, incluyendo un crecimiento anormal del tejido alrededor de la córnea.